Vida, Vocación y Resistencia
Blanca Estela Kempis Robles es una mujer que se ha forjado en la encrucijada entre el compromiso con los derechos humanos y el amor profundo por la vida y el territorio. Hoy en día, Blanca Estela se describe feliz y plena como feminista, zapatista, médica cirujana y partera, fiel defensora de los derechos sexuales (no) reproductivos y apasionada del senderismo. Su labor diaria es una extensión de su ser: acompaña con dedicación a las mujeres y a todas las personas con capacidad de gestar en sus procesos, acompañándoles a tomar decisiones sobre su propio cuerpo con dignidad y alegría.
Madre y guía en la vida de su hijo, quien sigue sus pasos en el desafiante camino de la medicina, Blanca Estela también ha construido una familia en su asociación civil, Nuestro Cuerpos Nuestras Vidas A.C. A través de ella, ha brindado apoyo y acompañamiento en temas críticos para la salud sexual y (no)reproductiva, y ha promovido una atención digna. Su vocación también la lleva al ámbito de la medicina alternativa, siendo una terapeuta cannábica la cual le ayudó impresionantemente a cruzar el infierno de un cáncer raro, maligno y en su última etapa. Durante las quimioterapias y la radioterapia su recuperación fue más llevadera y sin efectos secundarios. Es fiel a la medicina tradicional mexicana. Ferviente católica, Blanca Estela sigue los principios de la Teología de la Liberación, inspirada desde su niñez por figuras como el Obispo Sergio Méndez Arceo, defensor de la justicia social y de los derechos de las mujeres.
En su clínica, un espacio ecológico que refleja su compromiso con el medio ambiente, cada visita es una experiencia de armonía con la naturaleza. Incluso las pequeñas acciones, como el uso de un baño ecológico, forman parte de la filosofía que ha construido a lo largo de su vida. Agradece cada instante y celebra ser quien es en su día a día, disfrutando de los lazos con su compañero Gregory Berger y con su familia.
Blanca Estela también valora profundamente el sentido de comunidad. Los memoriales y homenajes que organiza, como la instalación de una banca en la esquina de su vecindario, han logrado unir a amigos, vecinos y familiares en actividades emotivas y creativas que honran la vida y los recuerdos compartidos. En cada aspecto de su vida, Blanca Estela Kempis Robles elige el bienestar y la gratitud, y con ello, se convierte en un testimonio viviente de resistencia y empatía.