Pétalos púrpura. Un poema de Aleida Violeta Vázquez Cisneros

Si me miras así, debes saber que mi vientre se crispa con tus destellos de luz. 

Estoy hambrienta de placer y tus dedos en mi piel catalizan vestigios de deseos dormidos…

Las mareas ardientes de tu boca 

encuentran descanso entre mis pechos 

y se abren camino con soplos mansos y delicados;

tus cadenciosas bocanadas me estremecen…

me enternecen y me ciegan los miedos…

Dibujas con tu lengua en mi ombligo 

mariposas y colibríes que revolotean de impaciencia por el tiempo perdido…

por los espacios vacíos… y sigues… y sigo…

serpentean mis caderas invadiendo tus manos desbordadas de ambrosía 

Me sientes… me respiras…

parpadeas despacito en mis tímidos rincones y atizas en lo desconocido de mis fantasías; 

tu comparsa busca insistentemente en lo alto de mis ganas…

te enredas en mis cabellos y muerdes los lunares de mi cuello pero no te basta…

No te basta saturar mi espalda con tus besos… ¿quieres explorar?…

Si, se que quieres… quieres hurgar en todos mis sentidos 

para impregnar mi memoria de tus bríos 

y de todas tus hambres por fin saciadas.

Y vas… y vienes… enciendes… desciendes…

desciendes y mis muslos te reciben con placidez, 

ruborizados y tibios se preparan ansiosos como ensayando la danza del placer infinito…

y vuelves… jugueteas respiras en mi sexo 

y las mieles de mis pétalos púrpura te invitan al festín. 

Ven, mójate conmigo.. .júntate conmigo…

piérdete entre mis suspiros 

y esta saliva tibia que nos amansa momentáneamente este fuego…

ven… que me ilumina verte… yo también te siento… yo también te veo.

Me place llenarte de mi y llenarme de ti…

y luego soltarte… dejarte ir…

porque se que siempre volverás a mí…

El Faro. Punta Maldonado. Cuajinicuilapa, Guerrero. Foto: Ilaciones 2024.